OBRA en la oficina

EN LA OFICINA

_______________________________

Una obra teatral de

Michiko Solis

Copyright  ©  2013                                 Teléfono :  987951062

Por Michiko Solis                                   E-mail     :  cecisg0_0@hotmail.com

José: feje de la empresa

Marco: empleado de oficina

Teo: empleado de limpieza

Lugar: se encuentran JOSE y MARCO en la oficina principal de la empresa

JOSE: no olvides los papeles que deje sobre el escritorio

MARCO: ¿necesita algo más?

JOSE: eso es todo (arreglando sus cosas para retirarse)

MARCO: ¿un café?

JOSE: no gracias ya me voy a casa

MARCO: aún no son las 6

JOSE: Es el cumpleaños de mi hija menor y quiero llegar temprano.

MARCO: aún no se puede ir

JOSE: ¿por qué no?

MARCO: tengo algo importante que decirle

JOSE: si es sobre un aumento de tu salario, podemos llegar a un acuerdo mañana temprano

MARCO: muchas gracias señor

JOSE: hasta mañana

MARCO: No señor

JOSE: ¿no qué?

MARCO: no es de eso lo que le quería decir

JOSE: entonces

MARCO: estuve pensando en el futuro de la empresa y hay cosas que pueden ser un poco preocupantes para todos

JOSE: ¿qué está pasando?

MARCO: solo quiero que sepa que no hay nada que no tenga solución

JOSE: Marco ¿qué ocurre? ¿Pasa algo?

MARCO (tímidamente): Si señor…

JOSE: habla de una vez ¡por favor!

MARCO (con firmeza): su camisa no combina con su pantalón

JOSE (riendo): ¿eso es lo que te preocupa?, no soy muy bueno en estas cosas

MARCO: no querrá llegar así a casa, sería una vergüenza

JOSE: así fue como salí de casa

MARCO: la ropa no combina igual en la mañana que en la tarde; puedo decirle a la secretaria que le consiga una camisa que combine mejor con su pantalón

JOSE: no creo que eso sea necesario, gracias por tu preocupación (se acerca a la puerta)

MARCO finge un tropezón y derrama el café sobre el saco de JOSE

JOSE (gritando): ¡Marco!

MARCO: señor disculpe, soy bastante torpe, su presencia me pone bastante nervioso

JOSE: ¿Siempre haces tantos disparates?

MARCO: Solo cuando estoy con usted señor, ¿servilletas?

JOSE: si, gracias, parece que si necesitare otra camisa. (Se saca la camisa)

MARCO: yo me encargo de eso señor, no se mueva de aquí. (Sujeta la camisa)

JOSE: no te preocupes, antes de ir a casa voy al súper a comprar otra, no quiero retrasarme más

MARCO: si señor

JOSE: ¿por qué no me das la camisa?

MARCO: por qué aún está muy mojada y tiene que secarse primero, si se la pone así se puede enfermar y yo no quiero que eso le ocurra. (Comienza a soplar sobre la camisa)

JOSE: soplando no se va a secar

MARCO: yo le aseguro que sí señor, mi aliento es muy fresco

JOSE mira atentamente la acción de MARCO

JOSE: no pongo en duda que tu aliento sea fresco pero eso va a demorar mucho

MARCO: Si me concentro se secará más rápido

JOSE espera unos segundos

JOSE: ¿es suficiente?

MARCO: no me concentro bajo presión

JOSE: No es mi intención presionarte, pero tengo que ir a casa. El ventilador lo hará más rápido.

MARCO: No señor, ¿cómo cree? un objeto no puede superar a la habilidad humana

JOSE: seguro que no. ¡Ponlo frente al ventilador!

MARCO: ¡no funciona!, ¡se ha malogrado!, ¡el botón de prender no responde!, ¡lo presiono y lo presiono!,  ¡nada!

JOSE lo mira atentamente

JOSE: todavía no lo has enchufado

MARCO sorprendido enchufa el ventilador

MARCO: Va muy rápido

JOSE: no lo acerques tanto

MARCO: ¡ayúdeme!; me quiere quitar su camisa

JOSE: te dije que no lo acercaras tanto

MARCO: usted dijo que tenía prisa

JOSE: ¡desenchúfalo!, ¡no la jales!, ¡la vas a romper!

MARCO: tranquilo yo puedo con esto, no me va a ganar

JOSE: déjame pasar para poder desenchufarlo

MARCO: ¡quiere mi camisa también, no me quiere soltar!

JOSE sujeta a MARCO por la cintura

MARCO: Señor me va a sacar las tripas y ésta la camisa; ¡no atenten contra mí!

JOSE: pon de tu parte, si no quieres que te corte una mano

MARCO: ¡no señor!, ¡no favor!,  las manos yo las utilizo para escribir, mis manos son torpes pero no quisieron atacar su camisa tirándole el café. Puede tirarme café si quiere, ¡pero no me corte las manos!

JOSE: si pudiera cortarte algo, te cortaría la lengua para que dejes de hablar

MARCO: ¡no señor! Yo sin lengua no podría hablar, no podría decirle lo que está pasando

JOSE de un fuerte tirón saca a MARCO  de la ventiladora

MARCO: gracias señor, como podré agradecerle

JOSE: necesito tu camisa para llegar a casa, no le pasó nada, la mía son retazos de tela

MARCO: ¿mi camisa? Seria todo un honor para mí que usted haya elegido mi camisa entre tantas otras para llegar a casa, en una ocasión tan especial para la familia  

JOSE: no puedo honrarte si no te la sacas

MARCO: esto no pasa todos los días, solo quiero recordar los últimos momentos con ella

MARCO se quita la camisa lentamente

JOSE: gracias

JOSE se pone la camisa y sujeta sus cosas

MARCO: no señor, no se valla! Aun no me ha escuchado

JOSE: pensé que ya había sido suficiente

MARCO: se equivoca señor, nada en esta vida es suficiente, como cuando creo que ya es suficiente azúcar en su café y en realidad siempre necesita un poco más. Esta vez le aseguro que le había echado el azúcar necesario

JOSE: no lo dudo, (irónicamente) aun tienes la lengua, ya puedes hablar, ¿qué está pasando?

MARCO: no puede ir a casa

JOSE: claro que puedo, soy el feje de esta empresa

MARCO: feje admirable, amable, tolerante, comprensivo…

JOSE se dirige a la puerta

MARCO: ¡NO, señor, usted no se puede ir!

MARCO SUJETA DE LA PIERNA A JOSE

JOSE: suéltame la pierna; mañana te devuelvo la camisa si es eso lo que te preocupa, ¡suéltame o voy a despedirte!

MARCO: ¡no señor, no me despida, no se vaya! su casa queda muy lejos, no se puede ir. (Desesperado) ¡Su carro no está, lo robaron!

JOSE: ¿no está?

MARCO: Lo siento señor, debí poner más atención. No sé qué hacer…No sé qué decir…

JOSE: ya has hecho y dicho mucho por hoy; ya es tarde para mí, si sigo escuchándote no voy a poder ir al mecánico a recoger el auto  para poder llegar a casa a cenar.

JOSE sale de escena.

FIN